sábado, 28 de noviembre de 2009
fear factor
Y lo malo que es ver la tele a partir de u a determinada hora. Por que ayer vi un programa yanqui (al estilo de wipe out, aquí descrito) en el que una chica recogía los cadáveres de ratones muertos dentro de una cuba de agua. Con la boca y ella también dentro de la cuba. Esto es verdad. No sé de que va el programa por que cambié y no volví a poner la siete (también de la cadena amiga). Dios, que asco.
jueves, 26 de noviembre de 2009
¿Qué pasa en el intermedio?
Desde hace un tiempo el intermedio se repite más que una empanadilla de chorizo. Y no me refiero a Wyoming (que también, pero eso me mola). Me refiero a los reportajes.
¿No tienen plantilla? ¿Están en huelga de brazos caídos? Por que en otros programas de la sexta no se nota que lo hagan. Cada día hay nuevos contenidos. Una solución quiero.
Y no me valen excusas de que con Risto y Pablo Motos no tienen competencia.
Últimamente es que lo veo todo borroso.
miércoles, 25 de noviembre de 2009
Me repito hasta la saciedad
Es cierto, maldita sea. Aunque sólo en los temas. por lo demás intento darle siempre un aire diferente a los articulitos estos, pero no siempre lo consigo. Seguro que algún lector (alguno habrá que me siga y me lea cada cierto tiempo, aunque sea para reirse de lo tonto que soy) que se de cuenta de lo similares que son algunos. Bueno, paro que me estoy liando y no acabo de empezar (no acabo de empezar, la de vueltas que se le puede dar a esta frase en este momento).
El caso es que ayer volví a Perdidos. Y desde mi primera crítica, no demasiado buena, a la de hoy va a haber un mundo. Por que los guionistas se están saliendo. Lo malo es toda la mierda que te has tenido que tragar antes, todos los trucos tramposos para mantener la atención de unos espectadores dubitativos que lo único que conseguían era más tensión. Eso (gentuza) no se ha acabado. Aunque la serie está consiguiendo solventar incógnitas, resolver dudas y, en definitiva, ir cerrando el círculo más cuadrado que yo haya visto. El final de la quinta temporada me está encantando, grandes frases (pero con actores medianetes, en muchos casos), el personaje de Locke que lo da todo y una isla que se te come vivo. Entiendo ahora a la legión de fanáticos. Pero ha tenido que ser al final de la quinta. No sé como he aguantado tanto.
Por otra parte flashforward (hay un nombre de serie más complicado, que cuando lo dices parece que tienes la boca llena) no está manteniendo las expectativas. O al menos eso se comenta en las webs dedicadas a la tele (¿cómo esta?). Yo la llevo bien, pero es posible que no alcance el fenómeno perdidos. Ya se verá.
Pd.- En un artículo anterior no le daba más de una temporada. A ver que pasa.
El caso es que ayer volví a Perdidos. Y desde mi primera crítica, no demasiado buena, a la de hoy va a haber un mundo. Por que los guionistas se están saliendo. Lo malo es toda la mierda que te has tenido que tragar antes, todos los trucos tramposos para mantener la atención de unos espectadores dubitativos que lo único que conseguían era más tensión. Eso (gentuza) no se ha acabado. Aunque la serie está consiguiendo solventar incógnitas, resolver dudas y, en definitiva, ir cerrando el círculo más cuadrado que yo haya visto. El final de la quinta temporada me está encantando, grandes frases (pero con actores medianetes, en muchos casos), el personaje de Locke que lo da todo y una isla que se te come vivo. Entiendo ahora a la legión de fanáticos. Pero ha tenido que ser al final de la quinta. No sé como he aguantado tanto.
Por otra parte flashforward (hay un nombre de serie más complicado, que cuando lo dices parece que tienes la boca llena) no está manteniendo las expectativas. O al menos eso se comenta en las webs dedicadas a la tele (¿cómo esta?). Yo la llevo bien, pero es posible que no alcance el fenómeno perdidos. Ya se verá.
Pd.- En un artículo anterior no le daba más de una temporada. A ver que pasa.
viernes, 20 de noviembre de 2009
wipe out
O de como los yanquis saben que es la televisión y el ritmo. Bueno, no confundir con calidad televisiva.
Estaba viendo la tdt, zapeando infamemente por los canales llenos de "llama y gana", repeticiones, astrólogos o cualquier otra clase de mierda cuando me quede en la siete de la cadena amiga. Sí, telecinco. Había un par de presentadores de sonrisa blanca y ancha que me decían "Quédate, quédate". Bien les hice caso.
Wipe out, en castellano eliminar, se podría llamar "Hostiacas a gogó". Es un humor amarillo pasado por las esencias más americanas de eficiencia. Hay unas pruebas, hay unos concursantes y un buen montón de gomazos. ¿Por qué lo de eficiencia? Por que esta gente sabe lo que le gusta al público. Nada de concursantes capaces, no. Aquí hay de todo. Las señoras faltas de forma, los tocinetes, los adolescentes poco inteligentes, etc. Concursantes destinados a comerse un soplamocos de categoría por un premio de 50.000 dólares. Después las pruebas, diseñadas por el mismísimo satanás. Todo el mundo se come una hostia por lo menos, en cualquiera de ellas. En algunas, incluso, la mejor estrategia es tirarse. Bolas gigantes en las que es imposible mantenerse en pie, un muro lleno de guantes de boxeo articulados (en esta todo el mundo se cayó al barro), cintas que van a 25 km/h. Impresionante.
Aparte de todo esto lo mejor es que te ahorran la mierda, sólo ponen las mejores imágenes del concursante, en especial y como habréis adivinado, los mejores piñazos.
Emoción ninguna, categoría cero, guión inexistente. Pero macho que risa.
Estaba viendo la tdt, zapeando infamemente por los canales llenos de "llama y gana", repeticiones, astrólogos o cualquier otra clase de mierda cuando me quede en la siete de la cadena amiga. Sí, telecinco. Había un par de presentadores de sonrisa blanca y ancha que me decían "Quédate, quédate". Bien les hice caso.
Wipe out, en castellano eliminar, se podría llamar "Hostiacas a gogó". Es un humor amarillo pasado por las esencias más americanas de eficiencia. Hay unas pruebas, hay unos concursantes y un buen montón de gomazos. ¿Por qué lo de eficiencia? Por que esta gente sabe lo que le gusta al público. Nada de concursantes capaces, no. Aquí hay de todo. Las señoras faltas de forma, los tocinetes, los adolescentes poco inteligentes, etc. Concursantes destinados a comerse un soplamocos de categoría por un premio de 50.000 dólares. Después las pruebas, diseñadas por el mismísimo satanás. Todo el mundo se come una hostia por lo menos, en cualquiera de ellas. En algunas, incluso, la mejor estrategia es tirarse. Bolas gigantes en las que es imposible mantenerse en pie, un muro lleno de guantes de boxeo articulados (en esta todo el mundo se cayó al barro), cintas que van a 25 km/h. Impresionante.
Aparte de todo esto lo mejor es que te ahorran la mierda, sólo ponen las mejores imágenes del concursante, en especial y como habréis adivinado, los mejores piñazos.
Emoción ninguna, categoría cero, guión inexistente. Pero macho que risa.
lunes, 2 de noviembre de 2009
J.J. Vázquez ya tiene ondas
El ondas es un prestigioso premio. Aunque los galardonados sean unos majaderos. Este año, aparte de a J.J. se lo han dado a Carlos Baute a Macaco y a Fito y fitipaldis.
¿Estamos de coña? ¿Qué coño se premia? ¿Vender más? Los de música, es cierto, siempre han sido una mierda, este año también, los de radio, bueno y los de la tele no me disgustan (ese intermedio, que me quita las penas) si no fuera por el de Jorge Javier.
Darle un premio a este tipo me disgusta profundamente. Vender no es lo más importante. Para demostrar que la calidad y los premios son cosas diferentes sólo hay que ver la estantería de galardones de Dan "Truñazo" Brown. Vacía como mi cuenta corriente.
Lo peor es todo lo que siginifica ese premio. Se valora la información canalla, el entretener a cualquier precio, la zafiedad sin gracia, la incultura y calaña de sus tertulianos. Se premia a Belén Esteban.
A lo mejor Punset ya tiene demasiados premios. Joder, es que preferiría que se lo dieran a Ricardo Costa, por lo bien que da en cámara y su modulado acento pijolas.
El mundo se va al carajo, sobre todo cuando te enteras de que Antón Reixa es miembro del jurado.
¿Estamos de coña? ¿Qué coño se premia? ¿Vender más? Los de música, es cierto, siempre han sido una mierda, este año también, los de radio, bueno y los de la tele no me disgustan (ese intermedio, que me quita las penas) si no fuera por el de Jorge Javier.
Darle un premio a este tipo me disgusta profundamente. Vender no es lo más importante. Para demostrar que la calidad y los premios son cosas diferentes sólo hay que ver la estantería de galardones de Dan "Truñazo" Brown. Vacía como mi cuenta corriente.
Lo peor es todo lo que siginifica ese premio. Se valora la información canalla, el entretener a cualquier precio, la zafiedad sin gracia, la incultura y calaña de sus tertulianos. Se premia a Belén Esteban.
A lo mejor Punset ya tiene demasiados premios. Joder, es que preferiría que se lo dieran a Ricardo Costa, por lo bien que da en cámara y su modulado acento pijolas.
El mundo se va al carajo, sobre todo cuando te enteras de que Antón Reixa es miembro del jurado.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)