Aún de resaca me siento ante el ordenador, aún contento. La alegría de ayer, la alegría colectiva de toda la gente que quería que el equipo ganara, que salió a la calle a celebrarlo, merece la pena. No sé si el PIB va a subir gracias a la victoria pero tampoco me importa. Conseguir que las caras de felicidad que ví ayer por la noche es un logro histórico en este país sumido en una crisis inacabada.
Anoche no me importaban ni los gritos de "soy español", ni los vivas a españa, ni nada. Celebramos el gol una y otra vez, en cada repetición. Cantamos el "we are the champions" todas las veces que hizo falta, nos abrazamos con cada gol de futbolín que metimos después, como si los hubiera marcado ese fantasma de Albacete, ese tipo tan grande que es Andrés Iniesta, el autor de los goles más agónicos que he visto.
Pd.- Oeé, oeoeoe, oeeé, oé. En la foto Alejandro Finisterre, inventor del futbolín.
lunes, 12 de julio de 2010
viernes, 2 de julio de 2010
El genio de la publicidad
No sé el nombre de este genio, pero está claro que es un crack, un hombre que sabe lo que hace y piensa que todo es posible, que todo el mundo puede comprar un producto si la publicidad es lo suficientemente buena. ¡Maldita sea! Nunca se dijo una verdad tan grande. Y ser así hace que te lances a la piscina, que seas un provocador nato, que anuncies lactourea.
Sí, lactourea. Leche y urea. No se puede ser más claro. Lo mejor para tu piel, dicen. La combinación ganadora, la belleza en tus manos. La receta parece tan sencilla que cuesta creer que a nadie se le haya ocurrido probarla en casa. Había oído que los meados, el comunmente llamado pis, era bueno para las picaduras de medusa, o sea que todo encaja. Leche (ya sabéis que Cleopatra no salía de casa sin un bañito en leche de burra) y meados es la receta mágica para una piel saludable y bien nutrida (juas, juas). La industria cosmética ataca de nuevo con un nuevo producto, sacado de sus prestigiosos departamentos de I+D+i.
Me pregunto de donde sacaran la urea, aunque sé que no quiero saber la respuesta. Aquí un enlace.
Sí, lactourea. Leche y urea. No se puede ser más claro. Lo mejor para tu piel, dicen. La combinación ganadora, la belleza en tus manos. La receta parece tan sencilla que cuesta creer que a nadie se le haya ocurrido probarla en casa. Había oído que los meados, el comunmente llamado pis, era bueno para las picaduras de medusa, o sea que todo encaja. Leche (ya sabéis que Cleopatra no salía de casa sin un bañito en leche de burra) y meados es la receta mágica para una piel saludable y bien nutrida (juas, juas). La industria cosmética ataca de nuevo con un nuevo producto, sacado de sus prestigiosos departamentos de I+D+i.
Me pregunto de donde sacaran la urea, aunque sé que no quiero saber la respuesta. Aquí un enlace.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)